En realidad, ninguna es más importante que otra, se debe gozar de ambas para ser un profesional competente, integro y calificado, no basta no con ser el mejor o ser bueno en adquisición y/o absorción de conocimientos e incluso en la aplicación del mismo, se requiere una serie de habilidades comportamentales que permiten potenciar e incluso aplicar personalidad y ese "toque" propio a cada una de las tareas o actividades realizadas o por realizar.