Una mentalidad de crecimiento es la creencia de que nuestras habilidades se pueden desarrollar a través del trabajo duro y la dedicación. Podemos crear una mentalidad de crecimiento identificando nuestras fortalezas y debilidades, estableciendo metas desafiantes, celebrando nuestros éxitos, estando abiertos a la retroalimentación, siendo pacientes, reformulando los contratiempos como oportunidades de aprendizaje y enfocándonos en el esfuerzo en lugar del resultado.
¡Hola Alejandro!
Crear un mindset de crecimiento es fundamental para nuestro autodesarrollo. En el ejercicio que mencionas, se te pide pensar en cómo puedes poner en práctica dos posibilidades que se enseñaron en el curso para reforzar tu modelo mental de crecimiento.
Una forma de hacerlo es identificar tus fortalezas y debilidades. Puedes hacer una lista de las habilidades en las que te sientes más seguro y las áreas en las que crees que necesitas mejorar. Luego, establece metas desafiantes para cada una de estas áreas. Por ejemplo, si quieres mejorar tu habilidad para hablar en público, podrías proponerte dar una presentación en un evento o en una reunión de trabajo.
Otra posibilidad es celebrar tus éxitos y aprender de tus fracasos. Cuando logres alcanzar una meta o superar un desafío, tómate un momento para reconocer tu logro y sentirte orgulloso de ti mismo. Por otro lado, cuando enfrentes contratiempos o fracasos, en lugar de desanimarte, trata de verlos como oportunidades de aprendizaje. Reflexiona sobre lo que salió mal y busca formas de mejorar en el futuro.
Recuerda que el proceso de crear un mindset de crecimiento es gradual y requiere tiempo y esfuerzo. No te desanimes si no ves resultados inmediatos. Mantén una actitud abierta a la retroalimentación, sé paciente contigo mismo y enfócate en el esfuerzo que estás poniendo en lugar del resultado final.
Espero que estos consejos te sean útiles para crear tu mindset de crecimiento. ¡Sigue adelante y no te rindas!