¡Hola David!
Entiendo que a veces puede ser difícil salir de nuestra zona de confort y enfrentar los desafíos que nos presenta la universidad. Sin embargo, es importante recordar que cada vez que superamos esos obstáculos, estamos creciendo y desarrollando nuevas habilidades.
En relación a la actividad que mencionas, me parece que es una excelente oportunidad para reflexionar sobre situaciones pasadas en las que te hayas sentido atrapado en la zona de estrés. Piensa en qué fue lo que te mantuvo en esa zona y qué acciones podrías haber tomado para salir de ella más rápidamente.
Aquí te dejo tres actitudes que podrías considerar para la próxima vez:
Identificar tus emociones: Reconoce cómo te sientes en ese momento de estrés y trata de entender por qué te sientes así. Esto te ayudará a comprender mejor tus reacciones y a buscar soluciones más efectivas.
Buscar apoyo: No tengas miedo de pedir ayuda. Puedes acudir a tus profesores, compañeros de clase o incluso a recursos en línea para obtener orientación y consejos. A veces, una perspectiva externa puede hacer toda la diferencia.
Dividir el problema en partes más pequeñas: Si te enfrentas a un desafío abrumador, trata de dividirlo en tareas más manejables. Esto te permitirá avanzar paso a paso y te dará una sensación de logro a medida que vayas completando cada parte.
Recuerda que cada persona es diferente y lo que funciona para uno puede no funcionar para otro. Estas son solo sugerencias generales, pero te animo a encontrar tus propias estrategias que te ayuden a salir de la zona de estrés y entrar en la zona de aprendizaje.
Espero que esta respuesta te sea útil. ¡Mucho ánimo y sigue esforzándote! Estoy seguro de que con tu determinación y perseverancia, podrás superar cualquier obstáculo que se te presente.
¡Espero haber ayudado y buenos estudios! 19 99261-8042
