Además, es importante recordar que para salir de esa zona de ansiedad, de esa zona de estrés, necesitas encontrar tu punto de equilibrio para llegar a la zona de flujo. Entonces, recuerda, encuentra cuál es el motivo por el cual estás estudiando, a donde quieres llegar, cuál es tu misión, vocación, pasión, cuál es la razón. Y recuerda siempre ser consciente de tu estilo de aprendizaje. Estos tres puntos te ayudarán a llegar al flujo más rápidamente y a alcanzar tu zona de aprendizaje.