Salir de la zona de confort y empezar en una zona de aprendizaje es como empiezas a subir una montaña. Se debe empezar paso por paso, y poniendo nuestro empeño en cada proceso. Respirar, mirar cuanto hemos avanzado y seguir progresando hasta llegar a la cima. Sin embargo en la zona de aprendizaje debemos ser conscientes que para verdaderamente aprender, no debemos llenarnos de conocimientos sino procesarlo de la manera correcta y ponerlo en práctica.