Para poder estar en la zona del Flow, lo ideal es ir planteando desafíos parciales y adquirir, de la misma manera, las habilidades para superar esos desafíos. No sobreesforzarse, porque debido a esto caemos en los impulsos de procrastinar. Si nos sobreexigimos para aprender algo, luego podemos aburrirnos o deprimirnos cuando no entendamos un punto específico. En conclusión, una sobredosis de un tema nos generará satisfacción a corto plazo, pero no será sostenible en el tiempo y lo remplazaremos por actividades vacías y sin sentido.