Para alcanzar el estado de flujo, es importante encontrar un equilibrio entre el desafío de la tarea y las habilidades del individuo. Si el desafío es demasiado alto en relación con las habilidades, puede generar ansiedad. Si el desafío es demasiado bajo, puede llevar al aburrimiento.
La teoría del flujo explica el comportamiento que tenemos al aprender algo nuevo, que relaciona la complejidad de lo que queremos aprender y el nivel de habilidades que poseemos respecto a lo que queremos aprender, cuando ambos aspectos son lo suficientemente altos podemos llegar a un estado de "flujo" en donde mientras aprendemos se puede describir como si perdiéramos la percepción del tiempo , y si son lo suficientemente bajos podemos llegar al aburrimiento.