A manera de resumen, la teoría del flujo tiene tres componentes principales: 1) la experiencia del flujo en sí misma, 2) las características de la tarea y 3) las características de la persona que realiza la tarea. El flujo se produce cuando se produce un equilibrio entre las habilidades y el desafío, cuando la tarea es clara y tiene objetivos definidos, cuando hay retroalimentación inmediata y cuando la persona tiene un alto grado de control sobre la tarea.