Pienso que la técnica pomodoro debería iniciar con las tareas menos complejas, con el fin de aumentar los indicadores de gestión y evitar la presión del cliente externo a la organización. Incluso, el cliente interno también puede hacer presión cuando éste aboga por las solicitudes de algunos usuarios. Cuando se aborda la tarea más compleja, generalmente ésta no se termina en el acto, sino que deja dudas adicionales que se abordarán después afectando la eficiencia en las tareas menos complejas.