Para la realización de mi tesis procrastiné mucho porque no sabía por dónde empezar. Eso me hizo pensar que sería muy frustrante ir organizando mis ideas y no podía redactar un inicio.
3 actitudes que me sirvieron para mejorar eso:
- Compromiso con mi asesora y conmigo misma.
- Pedir más apoyo académico a mi asesora.
- No dejar de escribir aunque considerara tediosa la tarea que estaba realizando.