En un mundo de constantes transformaciones, es fundamental mantener nuestro conocimiento actualizado. Por eso, me he tomado un momento para reflexionar sobre cómo ha cambiado el entorno laboral y qué debo fortalecer como profesional.
Hace cinco años, una habilidad fundamental era el manejo básico de herramientas ofimáticas como Word y Excel. En ese momento, con solo saber redactar documentos, hacer tablas y enviar correos, se podía cumplir con muchos trabajos administrativos. Hoy en día, esa habilidad ya no es suficiente. Ahora se requiere un nivel avanzado de Excel, el uso de software contable como Siigo o QuickBooks, y la capacidad de automatizar tareas y generar reportes digitales.
En el mercado laboral actual están ocurriendo varios cambios importantes. Las empresas están digitalizando sus procesos contables y administrativos, exigiendo mayor dominio tecnológico. Además, ya no basta con registrar datos; ahora es esencial analizarlos para tomar decisiones estratégicas. También ha aumentado el trabajo remoto e híbrido, lo que requiere que los profesionales seamos autónomos, organizados y familiarizados con herramientas digitales de colaboración. Por otro lado, los clientes de hoy son más exigentes y esperan una atención eficiente, pero también humana y empática.