Se dio cuenta de que el propósito no tiene que ser fijo, puede ser mejorado, puede ser evolucionado. Entonces, en el momento que creas tu primer propósito, muchas personas pueden pensar que este es mi propósito, entonces necesito trabajar con él para siempre. Pero no, puede ser mejorado, puede ser cambiado, muchas cosas van sucediendo que no nos damos cuenta. Nuestra cabeza, nuestros pensamientos de un tiempo son muy diferentes al próximo año, en dos años, en cinco años. Entonces, no es algo que fue escrito en piedra, no es algo que necesita ser para siempre lo mismo. Puede ser mejorado, cambiado y evolucionado cada vez más.