Experimenté cierta dificultad al tratar de aprender francés en un punto dado, ya que me sentí abrumada por la ansiedad y la presión que sentía por alcanzar mis propias expectativas en relación al idioma. Me resultaba complicado comprender y adaptarme a ciertas temáticas del idioma, lo que me llevó a permanecer en la zona de estrés. Lo que me mantenía en esa zona era la frustración por no sentir que tenía la capacidad para aprender, cuando en realidad lo que sucedía era que me estaba limitando a mí misma debido a la ansiedad e inseguridad con mis conocimientos en el idioma.
Para salir de esa zona de estrés, me concentré en mis objetivos de aprendizaje y comencé a aprender más sobre mí misma, sobre cómo procesar y aprender de la mejor manera posible sin compararme con los demás. De esta manera, pude superar la ansiedad y avanzar en mi aprendizaje del idioma.