Si ya hemos realizado varias actividades para resolver un problema, no podemos dejar las cosas al azar... es fundamental escuchar de forma conjunta la retroalimentación de los involucrados, así se podrá encontrar el conocimiento, caso contrario, uno pudiera dar por resuelto un problema que solo a nuestros ojos se solventó pero que en la práctica todavía continúa, por otro lado, al retroalimentarnos sabremos cómo hacer mejor las cosas la siguiente vez...