Mi propuesta es que no, muchas veces tenemos que enfrentarnos con preguntas, que a veces por obviedad no contestamos al inicio y pensamos que, por el simple hecho de ser sencillas de contestar, no tienen derecho a ganarse algo de nuestro tiempo, me refiero a las preguntas básicas de ¿Quién soy yo en este momento antes de una meta? ¿Quién seré después de haber concluido esa meta? ¿Por qué pienso lo que pienso de mi propuesta sobre dicha meta? En resumen, creo que no hay nada más fundamental para iniciar una meta, que tener tiempo de calidad para percibirnos y reflexionar, que por el hecho de ser una cosa fuera de nuestra cotidianidad puede generar un esfuerzo, pero… ¿Estás dispuesto a pagarlo? Ese según yo debería de ser nuestro primer problema y después de solucionarlo, será nuestro amigo, que nos motive y nos diga: -"dijiste que pagarías el precio por esto y por eso que justificaste, no te rindas!". Claramente esto que comento no es una verdad absoluta y tal vez no este considerando más factores, pero estamos para aprender y estoy abierto a cualquier opción gracias por leerme.