Solucionado
Me parece interesante la startup interempresa y creo que va tomando cada vez más fuerza dentro de empresas tradicionales. Dado que se alínea de alguna manera con la industria en la que trabajas partes ya con una base de conocimiento importante, además asumes menos riesgo, pero también obtienes menos ganancias. Ahora, ¿qué ocurre cuando uno tiene la idea, pero no sabe bien cómo implementarla y recibe a poyo de programas orientados a entregar esa ayuda? ¿Sigue siendo una startup?
Hola Ana
A mi pensar todavía no existen reglas absolutas para determinar cuando una start-up puede dejar de serlo, existen diversos criterios que discrepan en algunos puntos y concuerdan en otros. Por ejemplo:
Como te dije estos puntos no son absolutos, pues hay que tomar en cuenta las particularidades de cada start-up
En mi actual trabajo, que comenzó como una start-up, aunque somos pocos los colaboradores; al surgir la pandemia se generaron oportunidades de crear otras líneas dentro de la misma, que cada uno maneja al ser empresas mas pequeñas que cada uno trajo a la empresa inicial. La autonomía es casi total, siempre y cuando la reputación de la empresa inicial no se vea afectada al usar los medios digitales de los cuales disponemos.