Hace 5 años saber manejar herramientas ofimáticas básicas era una ventaja competitiva. Hoy, se espera que lo domines y además que sepas automatizar procesos, usar inteligencia artificial y trabajar con datos.
Ya no basta con tener conocimientos estáticos: lo esencial ahora es aprender a aprender experimentar, colaborar en entornos remotos y pensar en soluciones digitales.
- Inteligencia Artificial (no solo usarla, sino entender cómo funciona)
- Ética tecnológica
- Automatización con herramientas low-code/no-code
- Habilidades blandas: comunicación, pensamiento crítico y adaptabilidad.
El conocimiento ya no se mide solo en títulos, sino en impacto, colaboración y capacidad de transformación.