Si nos detenemos a pensar un poco y echamos un vistazo al pasado, nos daremos cuenta que algunas de las habilidades que mencionare continuación fueron altamente valoradas en su momento. Algunas de esas habilidades son las siguientes:
- Saber utilizar un teléfono fijo
- Memorización y retención de información
- Saber transmitir información de material impreso a través de telefax
- Leer e interpretar mapas físicos
- Manejo avanzado de software específicos
Hoy en día, esas habilidades han sido reemplazadas o automatizadas por los recientes avances tecnológicos como la creación de los teléfonos inteligentes, buscadores y navegadores web, servidores de correos electrónicos, inteligencia artificial y aplicaciones de mapas digitales. Esto nos lleva a reflexionar sobre las competencias laborales y personales están en constate cambio en un mundo que cada vez más se suma a la revolución tecnológica. Los cambios que ocurren en el mundo nos enseñan la importancia de la adaptabilidad y la disposición que tenemos los seres humanos para mantenernos en constate aprendizaje. Lo que hoy consideramos esencial, quizás en algunos años pueda quedar obsoleto. Solo las personas que están abiertas a evolucionar junto con el mundo son las que se adaptan con facilidad a las nuevas necesidades.