Hace años, en el campo de la economía, era fundamental tener un sólido conocimiento de teorías económicas clásicas y la capacidad de realizar análisis estadísticos manuales. Sin embargo, hoy en día, con el auge del big data y la inteligencia artificial, se ha vuelto esencial dominar herramientas y lenguajes de programación avanzados como Python y R. Esta transformación ha elevado la barrera de entrada, ya que ahora se requieren competencias tecnológicas y analíticas más sofisticadas para realizar análisis de datos eficientes y precisos. Esto subraya la importancia de adaptarse continuamente a los avances tecnológicos para seguir siendo relevante en el ámbito económico.