Hace aproximadamente 5 años, la destreza en tecnologías como AngularJS o jQuery era fundamental para destacarse en el desarrollo web. Sin embargo, en el panorama actual, estas tecnologías han perdido parte de su relevancia, dando paso a frameworks como React.js y Vue.js. En lugar de enfocarse exclusivamente en una tecnología específica, se valora más la comprensión profunda de JavaScript y la habilidad para abordar la arquitectura de aplicaciones modernas. La tendencia actual en programación favorece la versatilidad y la capacidad de adaptarse a las últimas tendencias del campo.