Hace 5 años e incluso mucho más antes, en cada nueva materia o curso que llevaba, la habilidad que resaltaban los profesores era la de memorizarse términos o notaciones, a más no poder, aún si no las comprendías. Ahora, en cambio, ya no. Porque aún si no memorizas, puedes entenderlo y replicarlo, quizás con tus propias palabras.