Mi definición de éxito
Considero que el éxito no se limita únicamente a alcanzar metas o cumplir con indicadores establecidos. Para mí, el verdadero éxito radica en la capacidad de transformar ideas en soluciones concretas que generen impacto, especialmente cuando estas nacen de un proceso técnico, reflexivo y orientado a resolver problemas reales. Es la satisfacción de ver un proyecto —desde su fase más incipiente, con errores, ajustes y aprendizajes— convertirse en una propuesta funcional, eficiente y con sentido.
También entiendo el éxito como un camino de crecimiento continuo. Equivocarse, adaptarse y mejorar forma parte esencial del proceso. No se trata solo de resultados, sino de evolución: cada desafío superado debe dejarme mejor preparada técnica y humanamente. En ese sentido, el éxito implica aprender, crear valor y avanzar con propósito, sin perder la autenticidad ni la motivación por seguir construyendo.