Como reto personal a finales del año anterior me propuse crear nuevos hábitos que me ayudaran a crecer en diferentes aspectos de mi vida. En este tiempo, aunque por diferentes circunstancias he sido más o menos constante con algunos hábitos que otros, uno de los que más me ha ayudado es el de la meditación. Meditar todos los días durante 30 minutos me ha ayudado a calmar mi mente, entenderme y ser capaz de seguir adelante por más que a veces las cosas parezcan demasiado confusas.