Piensa en una situación de aprendizaje que ya vivencias y que tuviste dificultades en salir de la zona de estrés. ¿Cómo fue esa situación? ¿Qué te dejó preso en la zona de estrés? Es imponente enfrentarse a lo desconocido, a algo nuevo y en mi caso me preocupaba no tener bajo control lo que podría pasar. No tenía miedo, pero me faltaba seguridad, seguridad en mi capacidad, en mis conocimientos y mí mismo.
Ahora lista 3 actitudes diferentes que puedes tener en la próxima vez para no cometer los mismo errores y pasar rápidamente para la zona de Aprendizaje.
- No preocuparse si no ocuparse. Hay que hacerlo y algo saldrá, si no intentas nada no sucede nada.
- Hay cosas que están bajo nuestro control y cosas que no, hay que saber diferenciarlo. No podremos decir en qué momento llueve, pero sí podemos prepararnos y llevar un paraguas con nosotros.
- Confianza es la clave. Piensa en todo lo que has pasado, hasta donde has llegado por tus méritos y esfuerzo. Quizá aún no estás donde quieres pero ya no estás en el mismo lugar.