Piensa en una situación de aprendizaje que hayas vivido y que tuviste dificultad en salir de la zona de estrés. ¿Cómo fue esa situación? ¿Qué te dejó atrapado en la zona de estrés?
Cuando estaba realizando un trabajo de econometría, tenía el planteamiento del problema, los datos y 2 documentos científicos de los cuales podría sacar la teoría necesaria para ejecutar un modelo econométrico. A pesar de que tenía todas las herramientas sobre la mesa, tenía muchas dudas sobre la forma en que estaba desempeñando mi trabajo. Lo más complicado sería la especificación del modelo y la interpretación de los resultados luego de estar seguro de que no había ningún problema econométrico, sin embargo, tenía esa incertidumbre que me frenaba a cada paso que daba. Cuando terminé de escribir por completo, aún no me sentía conforme con el resultado, así que busqué otros trabajos para poder tener una guía de cómo lo estaba haciendo, al ver que estaba parecido, me sentí más aliviado e implementé algunas mejoras con mucha más calma.
Ahora lista 3 actitudes diferentes que puedes tener en la próxima vez para no cometer los mismos errores y pasar rápidamente a la zona de Aprendizaje.
• Leer más trabajos relacionados con el que estoy haciendo, para tener una guía, por ejemplo, en la forma en la que debe ser elaborado es algo muy útil para que algún detalle no perjudique el trabajo. • Trabajar con suficiente tiempo permite encargarnos de errores más pequeños sin tener tanta presión encima, lo cual permite que nos desempeñemos mejor. • Mantener la calma puede ayudarnos a visualizar mejor los problemas, también tener pequeños descansos suele ser útil para pensar en mejores soluciones para que el trabajo tenga un buen resultado.