Estar consciente de mi entorno, de las distracciones que pueden presentarse durante el día día, entonces establecer tácticas para mejorar mi concentración y motivarme más para alcanzar mis objetivos priorizados durante el día, y al final del mismo, analizar si los alcancé todos y si hubo factores distractores que me hayan afectado, esto, para cambiar el enfoque de mis tácticas de concentración e ir mejorando cada día, para que mi calidad de trabajo mejore cada día.