Vida espiritual: establecer una rutina diaria de meditación o oración. Salud física y mental: adoptar un régimen de ejercicio regular. Vida financiera: crear y seguir un presupuesto. Vida emocional: practicar la gratitud diariamente. Evalúa cada respuesta y determina cómo implementarlas de inmediato para simplificar y mejorar tu vida.