Vida espiritual: Aprender a metidar para poder despejar la mente ante una situación de estrés.
Salud física y mental: Seguir haciendo ejercicio pero mejorar mi dieta.
Vida financiera: Ahorrar y empezar a priorisar.
La vida emocional: Detectar aquellas relaciones que me benefician y eliminar las que me perjudican.