Las dos barreras que más suelen incomodar son:
Distracciones en el internet (redes sociales, páginas web, correos).
Plan de acción:
Establecer bloques de tiempo: Usar técnicas como Pomodoro para trabajar en intervalos de 25-30 minutos sin interrupciones. Bloquear sitios y aplicaciones: Instalar extensiones en el navegador (como StayFocusd) y limitar el acceso a redes sociales durante los horarios de alta productividad. Revisar correos y redes sociales en horarios fijos: Por ejemplo, dos veces al día.
Situaciones o problemas no resueltos en la vida personal o laboral.
Plan de acción:
Dividir el problema en partes manejables: Crear un plan de pasos concretos para abordarlo poco a poco. Definir momentos específicos para reflexionar o actuar: Reservar un horario para enfrentar directamente el problema, evitando que invada todo el día.