Identificar los distractores: Antes de empezar la capacitación, es importante identificar qué elementos pueden distraer a los participantes, como ruidos externos, dispositivos móviles, conversaciones paralelas, entre otros.
Establecer reglas claras: Al inicio de la capacitación, establece reglas claras sobre los comportamientos esperados de los participantes, como apagar los dispositivos móviles, no hablar mientras alguien más está hablando, entre otros.
Diseñar materiales atractivos: Si los materiales de la capacitación son atractivos, es menos probable que los participantes se distraigan. Utiliza imágenes, gráficos y ejemplos interesantes para mantener la atención de los participantes.
Utilizar técnicas de participación: Las técnicas de participación, como preguntas, discusiones en grupos pequeños y actividades prácticas, pueden ayudar a mantener la atención de los participantes y reducir los distractores.
Tomar descansos: Es importante programar descansos frecuentes durante la capacitación para que los participantes puedan relajarse y recargar energías. Esto puede ayudar a reducir la fatiga y los distractores.
Monitorear continuamente: Durante la capacitación, monitorea continuamente a los participantes y observa si alguno está distraído o necesita ayuda. Si detectas algún problema, abórdalo de manera inmediata para evitar que se convierta en un distractor para el resto del grupo.