Las variables en programación funcionan como un armario lleno de cajones donde guardamos información con un nombre específico. Al crear una variable, reservamos un espacio en la memoria de la computadora para almacenar un valor que podemos reutilizar. Este valor puede cambiar a lo largo del código, de ahí el nombre "variable". En CSS, por ejemplo, podemos definir variables globales con :root
, como --tamano-de-la-fuente: 24px;
, y reutilizarlas en diferentes partes del código. Las variables son esenciales en el desarrollo y están presentes en múltiples lenguajes de programación.