La Curva del Olvido realmente pone en perspectiva lo difícil que puede ser recordar algo si no lo repasamos. Me hace pensar en lo fácil que es aprender algo nuevo, pero también en lo rápido que lo olvidamos si no hacemos un esfuerzo consciente por repasar. Lo bueno es que la clave está en la repetición espaciada; al repasar de vez en cuando, podemos mantener viva la información a largo plazo. Es un recordatorio de que aprender no es solo memorizar, sino también darle espacio a la información para que se quede en nuestra mente.