Me ha resultado muy interesante este tópico. Creo que incialmente, hay una gran diferencia entre memorizar y comprender. Cuando aprendemos por ejemplo, un concepto nuevo, memorizar las palabras que conforman una definición no resulta difícil, se puede conseguir simplemente leyéndola o escuchándola varias veces, y acto seguido uno es capaz de repetirla. Pero esto, como dice el artículo, se esfuma en un corto lapso de tiempo. Cuando estamos aprendiendo, comprender resulta, en mi opinión, un aspecto clave en el aprendizaje. Poder reformular quizás el concepto con nuestras propias palabras, o como se mencionó en clases, poder explicarle dicho concepto a alguien más, resulta en afianzar el conocimiento nuevo que hemos adquirido. Pero esta distribución del aprendizaje y el repaso de lo que hemos aprendido, al menos de forma empírica, escapaba de mi conocimiento. Creo que resulta obvio que al repasar uno interioriza lo estudiado, y mientras más se repite este proceso, resulta más sencillo conservar dicha información. Pero verlo en un gráfico, donde se puede observar la evolución de la curva, permite llevar verdadera conciencia a la importancia de dicho proceso.