Para organizar mis tareas, primero tengo que hacer una lista de todas las tareas que tengo pendientes. Luego, debo priorizar las tareas más importantes y urgentes para poder dedicarles más tiempo y atención. Es importante establecer plazos realistas para cada tarea y asignar tiempo específico para completar cada una. Después, debo crear un calendario para visualizar mis tareas diarias y semanales. Es recomendable revisar y actualizar mi lista de tareas regularmente, para asegurarme de estar en camino y de cumplir con los plazos. Por último, es importante ser flexible y ajustar los planes según sea necesario. Siguiendo estos pasos, podré organizar mis tareas de manera más efectiva y reducir el estrés.