Nuestro mindset o forma de pensar puede cambiar a lo largo de la vida y evolucionar continuamente a medida que adquirimos nuevas experiencias, conocimientos y perspectivas. Podemos aprender y cultivar una mentalidad de crecimiento que nos permita desarrollar todo nuestro potencial, o bien, podemos tener una mentalidad fija que nos limite. Cambiar nuestro mindset no es fácil, pero con práctica y perseverancia, podemos identificar y desafiar nuestros pensamientos limitantes y alcanzar nuestros objetivos