El cerebro opera en modo enfocado al estar concentrados e involucrados en estudiar o analizar un tema determinado, o trabajando en un proyecto. El cerebro también opera en modo difuso al estar en tiempos de recreación, ocio o relajados.
Al ir alternando estos dos modos, tomando pausas entre momentos de modo enfoque y modo difuso, se puede conseguir aprendizaje más fructífero. Ésto se relaciona con algo biológico.
El descanso ayuda mucho, y al estar el cerebro en modo difuso es un momento propicio para que surjan ideas sobre los temas que nos conciernen.