Para mantener un hábito nuevo o antiguo, no soy de darme recompensas, debido a que tengo el pensamiento que estos hábitos que adquiero o adquirí, los hago con el objetivo de mejorar como persona, como hijo, como estudiante; mejor dicho, ser gran hombre de bien. Pero gracias a la clase, no hay nada de malo darse esas recompensas que te motivan a seguir con los hábitos que te hacen mejorar cada día más.