Confianza.
Una palabra tan poderosa si se usa de la manera correcta. La comunicación entre humanos, ya sea un grupo de dos o más, e incluso con uno mismo, es de suma importancia. Comunicación asertiva aún más.
Partir portando la bandera de confianza, con y para los integrantes de un equipo refleja una gestión laboral correcta; donde cada integrante, al tener una completa y real oportunidad de proponer, aportar e incluso discernir si es necesario, genera un ambiente orientado al éxito del equipo.
Establecer roles flexibles, dependiendo de la situación o proyecto, provoca inequívocamente un flujo de ideas, que en rara ocasión se detiene.
La confianza, cimentada por la comunicación, es una herramienta, un factor decisivo a la hora de orientar un proyecto de cualquier magnitud al éxito.