Crear un hábito es un proceso desafiante porque tenemos que salir de nuestra zona de confort. Lo que a mí me ha ayudado ha sido:
- Establecer la razón por la que quiero iniciar con ese hábito: por qué lo quiero hacer
- Fijar metas claras y alcanzables: lo que quiero lograr
- Crear recordatorios: esto ayuda a integrar el hábito a la rutina diaria
- Empezar de poco a poco: no intentar cambiar de la noche a la mañana
- Ser consistente: intentar realizar la actividad todos los días hasta que se convierta en una parte normal de la rutina
- Recompensarse: celebrar ese logro de haber cumplido con el hábito
- Ser flexible: No castigarnos si fallamos un día, lo importante es retomarlo
Y bueno, mucha perseverancia y paciencia.