Aprendí a definir objetivos de aprendizaje claros y específicos y a estructurarlos de manera efectiva utilizando un enfoque INTELIGENTE, asegurándome de que sean específicos, mensurables, alcanzables, relevantes y con plazos determinados. Entiendo la importancia de medir y evaluar continuamente mi progreso para identificar áreas de mejora. Además, aprendí a dividir el contenido de aprendizaje en partes manejables, lo que facilitó la absorción y retención de información. Este conocimiento me proporcionó estrategias integrales y efectivas para lograr mis objetivos educativos y profesionales.