Aprendí que atraer visualizaciones en LinkedIn no depende solo de publicar, sino de hacerlo con estrategia. Usar títulos llamativos, imágenes relevantes, hashtags bien pensados y llamadas a la acción puede marcar la diferencia entre pasar desapercibido o generar interacción real.
También me pareció clave entender que el contenido no es solo información: es nuestra voz profesional. Cuando compartimos algo útil, auténtico y alineado con nuestras metas, estamos construyendo una marca personal que puede abrir muchas puertas.