Lo que aprendimos en esta aula de los diversos temas que estudiamos, puedo decir que comprendimos que el verdadero crecimiento personal ocurre cuando salimos de la zona de confort y entramos a la zona de aprendizaje, donde enfrentamos retos que nos exigen pero aún podemos manejarlos; sin embargo, también identificamos que ir más allá de ese punto nos lleva a una zona de estrés donde nos puede bloquear nuestro desarrollo, por lo que es clave reconocer e identificar nuestros límites. Descubrimos la importancia del estado de flow, ese momento en el que estamos tan concentrados y motivados que el tiempo parece desaparecer, y cómo este estado suele darse cuando hay un equilibrio entre desafío y habilidad. También reflexionamos sobre cómo, en el camino hacia nuestras metas, es más valioso avanzar con dirección clara y con un objetivo que con apuro y velocidad, ya que moverse rápido sin saber hacia dónde no nos llevar a ningún lado. Entendimos que los hábitos son la base del cambio real: no se trata de grandes esfuerzos puntuales, sino de pequeñas acciones consistentes. Finalmente, reconocimos el papel de los distractores en nuestra vida diaria y cómo aprender a manejarlos, nos puede ayudar a mejor nuestra capacidad de enfocarnos y avanzar en nuestro desarrollo.