El enfoque es como tener un faro que ilumina el camino hacia lo que realmente importa en la vida. Cuando te concentras en una meta o área específica, te permite avanzar con determinación y claridad. Evita que te disperses en cosas que no son prioritarias y te ayuda a tomar decisiones más efectivas. Es como poner toda tu energía en una dirección definida, lo cual puede hacer que alcances tus objetivos de manera más eficiente y satisfactoria.