Las personas con un estilo de aprendizaje convergente son muy buenos en la resolución de problemas y en el análisis de información. Les gusta trabajar con datos y hechos concretos, y tienden a ser lógicos y objetivos en su pensamiento. A menudo, tienen habilidades técnicas o científicas y disfrutan de trabajos en áreas como la ingeniería, las matemáticas, las finanzas y la informática.
Las personas con un estilo de aprendizaje convergente pueden encontrar más difícil trabajar en situaciones que requieren creatividad o pensamiento abstracto. También pueden encontrar desafiante trabajar en situaciones sociales o en grupos grandes. Sin embargo, pueden mejorar en estas áreas a través de la práctica y la exposición a diferentes tipos de situaciones de aprendizaje.