Para tener una buena productividad primero que nada hay que tener conciencia de lo que sucede a nuestro alrededor para así poder administrar mejor los tiempos y prioridades para realizar las tareas. Al tener conciencia de mi entorno, podré tener un plan tomando en cuenta lo anterior y así ser más productivo en mi día a día, ya sea estudiar, trabajar o cualquier otra actividad que identifique como una prioridad, teniendo siempre presente que ser flexible es algo tan importante como ser productivo y manteniendo el foco en cumplir con los objetivos propuestos.