La curva del olvido es una teoría desarrollada por el psicólogo alemán Hermann Ebbinghaus en la década de 1880. La teoría sugiere que cuando aprendemos nueva información, tendemos a olvidarla rápidamente a menos que repitamos y revisemos la información con regularidad. La curva del olvido muestra que después de haber aprendido algo, se olvida rápidamente durante las primeras horas y días, pero luego la tasa de olvido disminuye con el tiempo.
Ebbinghaus realizó una serie de experimentos en los que memorizó listas de palabras sin sentido y luego midió su capacidad para recordar esas palabras en diferentes momentos en el futuro. Descubrió que la tasa de olvido era más alta inmediatamente después de aprender la información y que la mayoría de la información se había olvidado después de unas pocas semanas. También descubrió que si revisaba la información regularmente, podía retenerla por más tiempo.