La curva del olvido de Ebbinghaus es un modelo que describe cómo se pierde la información en la memoria con el tiempo si no se realiza un esfuerzo por recordarla. Fue desarrollada por Hermann Ebbinghaus, un psicólogo alemán, a fines del siglo XIX. Según este modelo, el olvido ocurre de manera más rápida justo después de aprender algo nuevo, y la tasa de olvido disminuye con el tiempo.
Ebbinghaus descubrió que, sin repaso, se puede olvidar hasta el 50% de la información en una hora, cerca del 70% al cabo de un día y alrededor del 90% en una semana. Sin embargo, la repetición y el repaso en intervalos regulares ayudan a reforzar la memoria, desacelerando significativamente la curva del olvido. Este concepto destaca la importancia de la práctica distribuida y el repaso activo para retener conocimientos de manera efectiva.