hace un tiempo, cuando empecé una rutina de ejercicios y comencé a establecer un horario fijo para dicha actividad, noté que muchos aspectos en mi vida cambiaron, desde el estado de animo, hasta la forma de ver la vida. se despejó mi mente y empecé a observar y a poner atención a cosas que antes me parecían superfluas o pasajeras.