En mi caso, al crear el hábito de dejar de fumar, he experimentado cambios positivos en mi vida diaria. He notado que mi nivel de ansiedad ha disminuido considerablemente. Esto ha resultado en una reducción de la necesidad de buscar sustitutos como la comida entre comidas, lo cual ha contribuido a mantener mi peso. Además, me siento más en control de mis emociones y con más energía para participar en actividades físicas.