Es muy sencillo perder la concentración con la gran cantidad de distracciones que existen, incluyendo los pensamientos que surgen en nuestra propia mente. Por esta razón, resulta difícil mantener la atención durante períodos prolongados. La técnica Pomodoro, con sus períodos de 25 minutos de trabajo seguidos de 5 minutos de descanso, tiene sentido porque cuando nos distraemos, generalmente lo hacemos durante largos períodos de tiempo, lo que puede llevar a perder horas. Es importante contar con técnicas que nos ayuden a mantenernos enfocados. Quizá la señal que se mencionó en capítulos previos para ayudar a la concentración pueda ser útil. En realidad, lo que parece una solución simple puede ser más complejo de lo que parece.